Fabbiani había prometido que el Millonario iba a aplastar a los uruguayos pero nada de eso pasó. Nacional lo peloteó de lo lindo y convirtió en figura del partido a Barbosa, responsable del empate en cero. El equipo de Gorosito, que tuvo también varias chances para abrir el marcador, quedó complicadísimo para pasar a octavos.
El partido se jugó en el estadio Monumental de Núñez, con un aceptable trabajo del árbitro brasileño Salvio Fagundes. Con este resultado Nacional de Montevideo lidera el Grupo 3 con 10 unidades, seguido por Universidad San Martín de Perú, que tiene 7, mientras que River está con 4, cerrando Nacional de Paraguay con 1 punto.
River le quedan dos partidos en este Grupo 3: dentro de dos semanas enfrentará a Nacional de Paraguay, en Asunción, y cerrará esta etapa de la Libertadores enfrentando a Universidad San Martín, en el estadio Monumental, el próximo 30 de abril. O sea que deberá ganar los dos partidos sí o sí.
Desde el inicio a River se le hizo cuesta arriba el partido, porque Nacional se paró bien, lejos de su arco, presionando en el medio y dándole muy seguido, sobre todo en el primer cuarto de hora, la pelota a Angel "Matute" Morales, el jugador más claro de la etapa inicial.
De esta manera, el equipo de Néstor Gorosito no podía vulnerar a la defensa uruguaya y eso impacientaba a la gente, que veía como River deambulaba por la cancha sin poder lastimar al rival.
Recién a los 22 minutos el conjunto local tuvo su gran chance y fueron cuatro en una, porque en una misma jugada estuvo en cuatro oportunidades a punto de abrir el marcador. La jugada la inició Gallardo, por el sector izquierdo, dejando solo a Falcao con el arquero, pero salvó el arquero, el rebote le quedó a Fabbiani y el travesaño dijo no, ahí apareció Diego Barrado y Fede Domínguez la sacó en la línea y en la cuarta a Falcao le ahogó el gritó un otro defensor nuevamente sobre la línea. Fue una jugada insólita.
Nadie podía creer en el estadio Monumental lo que había pasado en esa jugada, pero si River si se hubiera puesto en ventaja no era por su fútbol.
En el segundo tiempo otra fue la historia del partido: Nacional salió a jugar de contra y complicó muchísimo a Barbosa, quien se fue transformando en la gran figura de la noche, con tapadas espectaculares. Vale decir que también el local contó con chances, pero en los últimos 20 minutos pudo perder el partido ya que los uruguayos contaron con al menos 5 chances clarísimas.
El empate provocó que los hinchas de River comenzaran a insultar a sus jugadores, mostrando su malestar, generando más nerviosismo entre quienes intentaban conseguir un resultado que les permitiera soñar con los octavos de final de la Copa Libertadores de América.
Fuente: Super Gol